“Manejar una Harley es como volar”

El cantautor David Blanco anda de motociclista por las calles matanceras a propósito del II Encuentro de Motos Harley Davidson. Se me presenta por pura coincidencia durante la rutina diaria de trabajo cuando me entero que estaba en TV Yumurí para presentarse en la Revista Informativa del Mediodía. Aprovecho la oportunidad y en un saloncito de espera, después de maquillarse, intercambio unas palabras con el autor de “Despechao”.

El joven artista recordó que desde niño le interesaban las motos. “Yo tenía en mi cuarto afiches de motos pegados en la pared y me decía que cuando fuera grande me gustaría tener una”.

Al preguntarle sobre el por qué de su interés por las motos Harley Davidson expresa que es uno de sus hobbies principales. “Hace algunos años que tengo una Harley y soy integrante del circuito de amigos, en el cual todos compartimos esa pasión por las motos y creo que me saca bastante  de la parte mía musical, de mi trabajo que es a veces tan estresante”, afirma.

“Cuando monto una Harley y cojo carretera es como si volara”, enfatiza.

“Para mí lo importante no es el sentido material del asunto, sino el lado humano, el poder compartir por toda Cuba con amigos y conocer a nuevas personas de las diferentes provincias de Cuba. Es parte del sentido de permanecer en la Tierra”, comenta.

Casi todas las motos de esa marca norteamericana que circulan en el país llegaron antes de 1960, debido a que después se imposibilitó su entrada y la importación de sus piezas por el bloqueo económico y comercial de Estados Unidos a Cuba, las mismas se conservan gracias a la inventiva de sus amantes. En la Isla se mantienen caminando unas 150, de las 300 que hay inscritas y la edad de estos vehículos oscila entre los 50 y los 76 años.

La moto de David Blanco es una Harley clásica del año 1958 y con ella participó en el desfile que se efectuó  del 8 hasta el 11 de febrero en el balneario de Varadero.

“Este evento promueve la unión entre los motoristas, la disciplina a la hora de ser chofer. No es un evento que tenga entre sus razones ganar nada, porque además no son competencias de velocidad, normalmente lo que se hace son competencias de habilidades, en las que puede estar la moto que circula más lento sin poner los pies en el piso, la más antigua, la más original, la más linda….

“Normalmente lo que hago es poner la música y organizar la parte artística del evento, que ya es internacional, porque vienen grupos de Dinamarca, de Canadá, de Ucrania, latinos también, y es bonito porque son tres días de fiesta, de compartir, de exposición,  de rally, de ir por las calles con las motos y es algo que el público agradece porque es un espectáculo y la música no puede faltar”.

Con un gran concierto en el Anfiteatro de Varadero, David Blanco dejó inaugurado el segundo encuentro de harlistas cubanos y festejando su cumpleaños el pasado 10 de febrero.

“Fue un concierto por todo lo alto con PMM, pues utilizamos la última tecnología que existe en el país, con pantallas, luces,  un sonido nuevo, todo estuvo bien preparado. Además lancé mi nuevo disco que ya había anunciado el 22 de diciembre en el teatro Karl Marx, e interpreté canciones nuevas y las de siempre, que desde luego la gente escucha y pide”.

Sobre la importancia de este tipo de  encuentro expresó que lo más importante es promover una cultura que es cubana, no extranjera, ni nada por el estilo, es cubana y siempre Cuba se ha caracterizado por tener carros y motos clásicas: “La música cubana es muy clásica también, todo está mezclao”, dijo sonriente.

“Pero sobre todo eventos como este sirven para educar en lo que es el movimiento y el tránsito de las motos por nuevas vías, porque desgraciadamente hay accidentes, motoristas que no adoptan todas las medidas de seguridad que se deben tener y este encuentro sirve de motivo para prevenir accidentes”.